GEMA Y SUS DEVOTOS

“Nosotros conocimos a Sta. Gema en junio de 1977, justo en un momento que nuestra situación familiar era critica, pues mi esposo se había quedado sin trabajo, con lo que significa eso...Mi esposo no era católico practicante, pero se acercó a la Iglesia y yo me compadecía de todos los que sufrían pero no hacía nada por ellos, hoy puedo decir que sí me preocupo , me acerco y comparto su dolor, y todo lo hago con amor. Todo esto se lo debemos  a Santa Gemita porque desde que la conocimos fuimos cambiando nuestras actitudes y esto se los debemos a ella”.  María Cristina de Buenaventura.

“Mi marido siempre fue católico, pero no practicante.  Desde que conocimos a Santa Gema, en cambio, se confiesa, se comulga y no descansa de noche sin encomendarse a Santa Gema. Tenemos trabajo y pudimos cumplir con el sueño de la casa propia”.Familia Buenanueva -Cinco Saltos  -Río Negro-    Argentina

“Un nieto mío, desde la edad de un año, sufría la desviación de un ojo.  Cuando tuvo tres años, los médicos decidieron operarlo, su familia junto conmigo comenzamos la novena a Santa Gema. La intervención fue con éxito, y, juntamente con esa gracia se dieron otras dos más-que yo había pedido- que tuviera inteligencia para seguir estudios superiores y el don de la vocación religiosa.

Pues bien: Adrían se halla hoy en el Aspirantado Saleciano y sobresale por su gran inteligencia”.    María de Perissé.

“Soy asidua concurrente a la Capilla del Monasterio Santa Gema y muy devota de ella.

Vivo con una tía muy enferma, que meses atrás no podía caminar y estaba siempre postrada en la cama.

Le pedí a Santa Gema que me hiciera la gracias que mi tía caminara y por su intersección, volvió a caminar”. Ema Sampayo

“Mi esposo fue operado de un tumor en la cabeza.  El diagnóstico decía que tenía seis meses de vida Por intermedio de una prima llegó a mis manos una estampa de Santa Gema: le pedí tanto, decía su oración y le rezaba, para que le concediera algunos años más de vida.

Mi esposo se fue recuperando, cumplí con las promesas y vivió seis años más y bien. Gracias Santa Gema, Gracias Hermanitas Pasionistas”.    Nilda R.G. de Zappi”

“Una señora asistente del Hospital Ramos Mejía, tiene dos hijos médicos que en el tiempo de la gracia que vamos a relatar eran estudiantes.

El mayor, cercana la fecha de exámenes finales, se enfermó, perdiendo el turno.

La madre muy afligida, prometió a Santa Gema que, si se formaba mesa especial para su hijo, ella haría todo lo posible para hacerla poner en la Capilla del Hospital.

Rezó tan bien y puso tanta confianza en Santa Gema que mereció recibir tres gracias en vez de una:

1- Formaron mesa especial para el examen de su hijo, saliendo muy bien.

2- Alcanzó el permiso del Director del Hospital para poner a Santa Gema en la Capilla, siendo que varias que veces lo había negado al Padre Gabriel Green, C.P. que era ayudante del Capellán.

3- Dónde encontrar una estatua del tamaño adecuado?

Ninguna santería las tenía. Recurrió entonces al monasterio Santa Gema y las Hermanas la pusieron en comunicación con el Monasterio de Chile y allí la pudo conseguir. Esta señora la donó al Hospital Ramos Mejía, en cuya Capilla fue colocada con satisfacción general, el mismo día en que el nosocomio cumplía los 100 años de su fundación”.

“Queridas Hermanas Pasionistas: me dirijo a Uds. tal como se lo prometí a Santa Gema, que si por su intersección me conseguía lo que tanto necesitaba , trataría de difundirlo y por este medio lo hago.

Somos una de las tantas familias que hoy día estamos pasando una situación angustiante económicamente, en esta Argentina, pero con la ayuda de la Santa he conseguido solucionar el problema de poder pagar mi casita. Gracias Santa Gema.

Eva Gladys Torres - Río Tercero-  Pcia. De Córdoba  Argentina.

Todos los datos mencionados de las gracias concedidas, has sido proporcionados por las Hermanas Pasionistas del Monasterio de Santa Gema.

Las gracias concedidas, favor de comunicarlo al Monasterio de Santa Gema – Azara 1960 – Merlo Sur – Pcia de Buenos Aires

CP.1722